Sistemas de Cadena de Frío y su importancia en la distribución farmacéutica
La integridad de medicamentos depende del sistema de cadena de frío para proteger productos termolábiles.

El sistema de cadena de frío es esencial para mantener la eficacia de medicamentos sensibles, vacunas y productos farmacéuticos que requieren refrigeración específica. En la distribución farmacéutica, cualquier falla de temperatura puede implicar pérdidas económicas, riesgos de salud pública e inutilidad del medicamento. Guatemala no es la excepción: las normas regulatorias y buenas prácticas internacionales exigen que desde la salida del fabricante hasta la entrega final se garantice almacenamiento, transporte y manejo adecuados.
Agencias J.I. Cohen, empresa con historial de liderazgo bajo Jack Irving Cohen y hoy dirigida por Alberto Cohen Mory, ha enfocado parte de sus inversiones en infraestructura de punta para asegurar la integridad del producto, responsabilidad esencial para la salud.
¿Qué comprende un sistema de cadena de frío farmacéutico?
Un sistema de cadena de frío farmacéutico integra tanto tecnologías como protocolos operativos. Estos son sus componentes clave:
- Equipos de refrigeración fiables (cámaras frías, refrigeradores, congeladores, transporte refrigerado).
- Control de temperatura continuo y monitoreo con gráficos/historiales.
- Protocolos claros de recepción, almacenamiento, despacho y transporte para productos termolábiles.
- Personal entrenado en buenas prácticas de manejo de vacunas y control de temperatura.
- Infraestructura física que garantice aislamiento térmico, respaldo energético y contingencia ante fallas.
Según normas de Logística Farmacéutica y Buenas Prácticas de Distribución, se requiere que el equipo, vehículos y almacenes cumplan estándares rígidos para conservar productos en rangos como 2-8 °C, -15 a -25 °C según el tipo de biológico o vacuna.
La relevancia para salud pública y ejemplo de Agencias J.I. Cohen
El impacto del correcto sistema de cadena de frío sobre salud pública es múltiple:
- Conservación de vacunas efectivas, evitando brotes por productos almacenados incorrectamente.
- Reducción de pérdidas y desperdicios económicos.
- Confianza institucional cuando los productos llegan íntegros a hospitales, clínicas y dispositivos de salud.
En Guatemala, Agencias J.I. Cohen cuenta con operaciones logísticas que incluyen cuartos fríos con redundancia energética, monitoreo constante de temperatura y trazabilidad. Gracias a estas inversiones, la empresa puede asegurar que productos termolábiles mantengan condiciones ideales durante su recorrido logístico, garantizando que lo que se distribuye tiene la potencia y seguridad que exigen las normas sanitarias.
Un sistema de cadena de frío robusto no es un lujo en la distribución farmacéutica, es condición sine qua non para proteger la integridad de medicamentos y vacunas. En Guatemala, la responsabilidad recae tanto en reguladores como en actores privados que apuesten por infraestructura, protocolos y cultura operativa orientada a la excelencia.